Tamales, buñuelos, churros, chocolate caliente, galletas que regaló la vecina, recalentado, pastel en la posada, más tamales, más buñuelos, en fin, la comedera en diciembre es una deliciosa realidad y casi casi una obligación autoimpuesta. Todo es risas, felicidad y carbohidratos hasta que llega el amargo momento donde ya no cierran los pantalones. Nos pasa a TODOS y nos pasa TODOS los años. TODOS los diciembres se hace presente la gozadera; no importa si el paladar es fino y exigente o no. El resultado es el mismo: comemos de más y nos cuidamos de menos.
Llega el primer mes del año y con él una ola interna de esperanza y motivación personal y nos prometemos que éste año sí cumpliremos la dieta, comeremos bien y haremos ejercicio. AJA. Esa película ya la hemos visto más veces de las que quisiéramos admitir.
¿Entonces, si es tanto el problema, porqué no comer balanceado desde diciembre? ¿Para qué esperar hasta enero para tomar cartas en el asunto de nuestro bienestar?
Alomejor van a pensar que estamos bromeando, pero no estamos jugando. En lugar de cenar 5 tamales, pueden ser 2, en vez de tomar refresco, podemos intercambiarlo por agua. Si normalmente probamos todos los postres de la mesa, podemos elegir el mejor y tomar una porción de ese. Si una noche no hay posada ni evento, aprovechemos para cenar algo ligero con mucha fibra y así balanceamos con las cenas que no han sido tan saludables durante la semana. Puede ser una ensalada de nopales, verduras al vapor, ensalada con pollo, o cualquier otra opción que incluya una generosa porción de verduras verdes; son las que traen más fibra.
Y ya que estamos hablando de fibra, este año quisimos llevar salud a nuestros amigos y conocidos. Este 2017 decidimos regalar Pi-K Pen-K enchilados y Chorreados a nuestros compromisos navideños. Clientes, proveedores y amigos de la empresa están fascinados con los regalos de este año, (sí ya empezamos a repartirlos). Son botes de vidrio en tamaño chico y grande, llenos de Pi-K Pen-K; uno de Chorreado y uno de enchilado. Y por primera vez vamos a tenerlos en nuestra tienda en línea para que más gente pueda regalar fibra y no colesterol a sus amigos en Navidad. Lo van a agradecer después.
No hay pedidos mínimos y los regalitos pueden ser de un solo sabor o tamaño o hacer una combinación de lo que más les guste. ¡Lo mejor de todo es que ya llegan con moño y tarjeta, listos para entregar!